En esta historia un joven de 26 años decidió tomarse una taza de café instantáneo. Puso a calentar en el horno de microondas (algo que ya había hecho antes en varias ocasiones) una taza con agua sola.
Cuando el tiempo se acabo el horno se apago y saco la taza del horno. Mientras miraba la taza se dio cuenta que el agua no estaba hirviendo; sin embargo, el agua broto directamente a su cara.
Agua en el Microondas